
De Monmr – Trabajo propio, CC BY-SA 4.0.
Movido por el éxito en la modificación del Estratégico, el consistorio y la sociedad praviana, a través de su opinión publicada, es decir, su prensa local, se lanzaron con entusiasmo a la consecución del tercer trazado . El periódico Pravia había fenecido una vez conseguido su propósito con el Ferrocarril Estratégico, pero su redacción, colaboradores y estructura continuaron bajo una nueva cabecera, El Sol de Pravia.
Desde el comienzo del nuevo proyecto hubo falta de unidad de los municipios interesados; los ayuntamientos de Tineo y Salas fueron los más reacios debido a que en ambos casos el tendido no pasaría por sus respectivas capitales; frente a ellos, los ayuntamientos más entusiastas eran Cangas de Narcea y Pravia. Las reuniones, encuentros, etc., se sucedieron; Tineo propuso crear una mancomunidad de los ayuntamientos implicados y otra de las dos diputaciones provinciales, a saber, León y Oviedo. La propuesta que finalmente se hizo fue la de la creación de una mancomunidad de los ayuntamientos interesados, y que la Diputación emitiese un empréstito por la cantidad necesaria que, posteriormente, mediante prorrateo de los títulos de emisión entre los municipios y la Diputación —cuyo importe, unido a la subvención de 75.000 pesetas por kilómetro a fondo perdido que daría el Estado y al anticipo reintegrable que otorgaría el gobierno central—, podría permitir el inicio de las obras del primer tramo. Una vez puesto en explotación, se emitirían obligaciones hipotecarias sobre dicho tramo que permitirían financiar el siguiente, y así sucesivamente hasta concluir el trazado.